jueves, 5 de febrero de 2009

Los mares del Perú y Colombia figuran entre los más afectados por el cambio climático

Washington (EFE).- Los sectores pesqueros de Perú y Colombia figuran entre los que podrían ser los más afectados en Suramérica por el cambio climático, pronostica un estudio internacional difundido hoy por la revista Fish and Fisheries.

La destrucción de los arrecifes, la irrupción de mares en hábitat de agua dulce y el mayor número de tormentas costeras resultantes del aumento de la temperatura supondrán dificultades sin precedente para millones de personas en países dependientes de la pesca en Suramérica, África y Asia, agregó.

La investigación, que identifica por primera vez a 132 naciones vulnerables al cambio climático en su industria pesquera, fue realizada por científicos del Centro Mundial de la Pesca, de universidades inglesas y alemanas, así como de la Comisión del Río Mekong (Vietnam).

Los científicos basaron su evaluación en factores ambientales, riqueza pesquera, dieta y economía.

LAS ESPECIES AFECTADAS
El informe indica que en la región norte de Suramérica, principalmente Colombia y el Perú, el cambio climático podría alterar las corrientes costeras que son hábitat de anchoas, sardinas y otras variedades ictiológicas.

Como ejemplo cita los cambios causados por el fenómeno de El Niño que han demostrado que un aumento de las temperaturas oceánicas podría provocar una declinación en las poblaciones de anchoas.

La vulnerabilidad de Colombia y Perú se explica por el alto volumen de captura destinada a la exportación y los cambios importantes en la temperatura previstos para el 2050, señala.

Sin embargo, el estudio destaca que las economías de esos países son más grandes o sus índices de desarrollo más elevados que los de las naciones vulnerables africanas, “lo que representa una mayor capacidad de adaptación para afrontar las posibles repercusiones del cambio climático”.

¿CÓMO ENFRENTAR EL PROBLEMA?
El reto para Colombia y Perú es reducir la vulnerabilidad con una mejor gestión de los recursos pesqueros, la planificación de la adaptación a largo plazo y el fomento de la investigación científica, dice el informe.

Según explican los científicos, los países que necesitan más atención no son necesariamente los que sufran el mayor impacto sobre su riqueza pesquera.

Más bien, serán naciones en las que la riqueza ictiológica representa una mayor influencia en la dieta, el ingreso y el comercio y que tienen escasa capacidad para adaptarse a los problemas causados por el cambio climático.

Al respecto señalan que en países vulnerables el pescado representa el 27 por ciento del consumo de proteínas, en tanto que para los no afectados ese consumo es de sólo 13 por ciento.

Los países vulnerables identificados por el estudio producen el 20 por ciento de la pesca mundial y deberían ser prioritarios en los esfuerzos de adaptación que permitan afrontar los efectos del cambio climático, según los científicos.